PROYECTO

Con esta campaña tan chula, nos metimos en los Premios Agripina como finalistas en la categoría de Mejor Campaña Institucional 2019. Este proyecto pretendía incidir directamente en la ciudadanía y visitantes a la Feria de Córdoba, promoviendo el “buen hacer” en:

• Concienciación sobre las personas con autismo, concretando un día que se dedicará al colectivo tomando medidas específicas para sus necesidades.

• Servicios públicos, promover los WC´s móviles que se incorporan este año como nueva medida.

• Respeto por el entorno natural, haciendo hincapié en los alrededores y zonas colindantes al río.
• Control respecto al consumo de alcohol, especialmente entre los mas jóvenes.

• Movilidad, promoviendo el transporte público.

• Sostenibilidad, apertura y limpieza.
• Diversidad e inclusividad.
• Respeto entre personas.
• Violencia machista.

Buscamos el impacto visual mediante un eslogan corto y con gancho, acompañado de una ilustración veraz y divertida, donde todas las personas indistintamente se sintieran identificadas.

Se usaron muchas tipografías y colores variados en los iconos, para simbolizar la diversidad e inclusividad, además de aportar un tono más divertido y alegre a la campaña. El color azul se ha transformado en un símbolo del autismo, representa de alguna manera lo que vivimos a diario las familias y las personas con este síndrome. Hay veces que el azul es brillante como el mar en un día de verano, y otras veces, ese azul oscurece y se disipa como un mar de tempestad.

Teniendo en cuesta la puntualidad, la escasa durabilidad y el modesto presupuesto con el que contábamos para la campaña, ideamos una estrategia audaz, económica y efectiva para llegar al mayor número de personas.

Ya que la campaña se basó básicamente en redes sociales, publicidad exterior y algunas acciones, para conseguir el mayor impacto posible, se hizo un perfil de página en Facebook, debido a que era la única red social que realmente funcionaba en los diferentes organismos. Esto, junto con la inmediatez del encargo nos obligó a desechar el resto de RRSS. Pusimos la carne en el asador en esta red social.

Desde el perfil se publicaron una serie de anuncios que abarcaban todos los conceptos a transmitir en tono de humor y de manera planificada, teniendo en cuenta factores propios de la feria como los días fuertes de botellón, de asistencia de estudiantes, fuegos artificiales, acción sobre el autismo, etc… así podíamos sectorizar la campaña y llegar al sector de la población que más nos interesaba en ese día. También se publicaron los artículos de prensa en cuyo contenido se hablaba de la campaña.

El plato fuerte de la campaña para conseguir mayor visualización y seguidores fue un con- curso. El concurso consistía en ponerse unas gafas con la forma del símbolo de campaña y subir fotos al perol. Además del impacto en las redes, pretendíamos que en la feria hubiese un soporte atractivo y tangible con el que se pudiera pasar un rato divertido y conocer la campaña.

Estamos muy orgullosos de ella.